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Los datos podrían incluso revelar qué mama es probable que esté afectada.Muchas mujeres de mediana edad y mayores se hacen mamografías cada uno o dos años para detectar el cáncer de mama, según lo recomendado por sus médicos.

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Cuando los médicos interpretan las mamografías , evalúan la densidad mamaria junto con los signos de cáncer, comparando las mam Comprar lista de números de teléfono celular ografías anteriores de la mujer con la más reciente para buscar cambios preocupantes. Pero algunos cambios son difíciles de detectar a simple vista.

En el nuevo estudio, los investigadores utilizaron un modelo matemático para monitorear los cambios en la densidad mamaria a lo largo de una década en casi 1.000 mujeres y encontraron que la tasa de cambio difería significativamente entre las casi 300 mujeres que luego fueron diagnosticadas con cáncer y las que no.

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Los hallazgos, publicados en JAMA Oncology , podrían ayudar a refinar los algoritmos de riesgo actuales y ayudar en los esfuerzos para identificar a las mujeres que podrían beneficiarse con exámenes de detección adicionales.

“Nuestra mejor herramienta contra el cáncer de mama es la detección temprana”, afirma el autor principal Graham A. Colditz, profesor de cirugía y director de la división de ciencias de la salud pública y director asociado del Siteman Cancer Center del Barnes-Jewish Hospital y la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington.

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“Al sumar el cambio de densidad en imágenes repetidas a los modelos de clasificación de riesgo en cada mama, preparamos el terreno para una mejor estimación del riesgo con cada mamografía actualizada. Luego podemos clasificar mejor el riesgo futuro y derivar a las mujeres a estrategias de prevención adecuadas, como la detección mejorada como parte de los servicios de salud mamaria de rutina”.

Los médicos calculan el riesgo de cáncer de mama de una mujer utilizando factores como la edad, los antecedentes familiares, la presencia de variantes genéticas de alto riesgo y la densidad mamaria. Las mujeres consideradas de alto riesgo son derivadas a exámenes complementarios, que generalmente implican exploraciones por resonancia magnética (IRM) anuales además de mamografías anuales.

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Nadie sabe realmente por qué las mujeres con senos más densos tienen más probabilidades de desarrollar cáncer de mama. El primer au prilagođene kutije za pizzu pomažu tor Shu Jiang, profesor asociado de cirugía en la división de ciencias de la salud pública dentro del departamento de cirugía y miembro investigador de Siteman, vio en las mamografías repetidas una fuente sin explotar de datos sobre la densidad mamaria y cómo cambia con el tiempo en senos individuales que podría arrojar luz sobre la relación entre la densidad y la enfermedad.

Analizó datos sobre mujeres en la cohorte de salud mamaria Joanne Knight en el Siteman Cancer Center. Colditz y sus colegas establecieron la cohorte en 2008 para estudiar los factores de riesgo y mejorar los modelos de predicción del riesgo de cáncer de mama. Está compuesta por un grupo diverso de más de 10.000 mujeres que no tenían cáncer cuando se unieron al estudio.

Jiang identificó a 289 mujeres de la cohorte que habían desarrollado cáncer y las comparó con 658 mujeres similares de la cohorte que no lo habían desarrollado. Cada mujer se había realizado mamografías periódicas, por lo que Jiang pudo recopilar y analizar un total de 8710 imágenes de una sola mama, lo que representa un promedio de cuatro puntos temporales durante un período de 10 años para cada mujer.

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Como el cáncer de mama rara vez se desarrolla en ambos senos al mismo tiempo, Jiang analizó las imágenes de cada seno por separado. Los se chicago business nos de las mujeres normalmente se vuelven menos densos a medida que envejecen, pero Jiang descubrió que la densidad disminuía significativamente más lentamente en los senos que luego desarrollaron cáncer que en los que no lo hicieron.

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